sábado, 27 de junio de 2009

ÉTICA PARA AMADOR

PROLOGO

El autor explica como durante su estancia en torre lodones comienza a escribir un libro en el que pretende explicar el arte de la buena vida humana a su menor hijo Amador, ante la imposibilidad de que este le preste atención, al decir del filosofo español, por más de 3 minutos a sus explicaciones verbales

El enunciador afirma que los chicos deben tener amigos y amigas de su edad y que siempre hay que dudar de los padres y maestros que se dicen amigos de sus hijos o pupilos,, supongo porque la amistad se da entre seres afines y se construye sobre la base de la libertad , el respeto, la igualdad, la fidelidad, la tolerancia y la confianza reciprocas y un padre o un maestro jamás pueden ser iguales a un crío , al menos en su desarrollo moral y toma de decisiones. El menor siempre va a necesitar de la autoridad de los padres y maestros que lo ayuden a crecer. Un padre o un profesor deben ser un poco cargantes o no sirven para nada.

Con apoyo en un sueño de amador, el autor le da como un valioso consejo que tenga confianza en si mismo, es decir que crea en sí mismo y no en dioses ni diablos , ni en curas ni en políticos , ni en sabios, ni en ignorantes, ni en nacionalismos a ultranza, ni en banderas ni en fronteras atomizantes, ni en etnicismos, ni en abstenciones radicales, ni en prohibiciones que dejan la libertad parapléjica.


DE QUE VA LA ÉTICA.

En este primer capítulo el autor hace una profunda reflexión sobre la existencia de múltiples saberes dentro de los cuales destaca uno al que considera imprescindible:

Saber que nos conviene, sobre la base del conocimiento de uno mismo y del mundo que nos rodea.

Así mismo afirma que el ser humano está programado por la naturaleza y la sociedad, por ejemplo: estamos hechos para tomar agua y no lejía; somos educados en ciertas tradiciones costumbres, formas de comportamiento, etc. Pero por mucha programación biológica y cultural que tengamos los seres humanos siempre podemos optar por algo que este fuera de nuestra programación, es decir podemos elegir entre lo conveniente o lo inconveniente, entre lo bueno y lo malo, entre lo positivo o lo negativo, entre lo correcto o lo incorrecto, entre destruir o construir. De esta manera, nos conduce al conocimiento de la palabra fundamental de la Ética: la libertad, es decir el poder de elegir entre lo posible, teniendo en cuenta que no somos libres de escoger lo que nos pasa pero si de responder a lo que nos pasa de tal o cual modo.

Aunque existen fuerzas que influyen sobre nuestra existencia, nuestra libertad es una fuerza transformadora en un universo de determinismos. A pesar de todo ello, los seres humanos podemos inventarnos una forma de vida y al hacerlo podemos equivocarnos por lo que es racional detenernos a pensar, una y otra vez lo que más nos conviene.

La ética va de las elecciones que nosotros hagamos para construirnos una buena vida humana, es decir aquella en que estemos rodeados de las dulces relaciones humanas. En la buena vida humana se vive rodeado de amor y agradecimiento, mejorando como persona y contribuyendo al mejoramiento de la convivencia humana recibiendo y devolviendo afecto de quienes nos rodean.


CONCLUSIÓN


Si no te conoces a ti mismo ni al mundo que te rodea no sabrás elegir lo que verdaderamente te conviene. Haciendo una analogía con una computadora, si no conoces sus propiedades no podrás usarla convenientemente y podrás caer, con facilidad, en errores, abusos e impertinencias.


ORDENES, CAPRICHOS Y COSTUMBRES


En este capitulo el enunciador nos hace reflexionar sobre las motivaciones de nuestro comportamiento, Por ejemplo en algunos casos existen circunstancias que nos obligan a elegir entre dos elecciones que en circunstancias normales nunca elegiríamos, en otras ocasiones hacemos nuestras elecciones casi de manera automática de acuerdo con nuestra programación biológica y cultural.

Entre las principales motivaciones de nuestros comportamientos encontramos:
Las órdenes, sacan su fuerza, en parte, del miedo a las represalias que se pueden tener en el supuesto de no obedecer, pero también en la esperanza de recibir un premio por cumplir con lo ordenado. Su característica principal es que provienen de una voluntad ajena.
Las costumbres, vienen de la comodidad de seguir la rutina en ciertas ocasiones y también en el interés de no contrariar a los otros. Su característica principal es que son heterónomas.
Los caprichos, provienen de tus apetencias que brotan espontáneamente sin que nadie te las mande sin que a nadie creas estar imitando, pero si reflexionar sobre su conveniencia o inconveniencia. Su característica principal es que parecen provenir de dentro.

En algunos casos puede haber órdenes, costumbres y caprichos que sean motivos adecuados para obrar de manera conveniente o placentera, por lo que sería irracional querer siempre llevar la contraria a este tipo de motivaciones, pero en muchas ocasiones hay que detenerse a reflexionar e inventar las elecciones que no estropeen las dulces relaciones humanas.


CONCLUSIONES


Casi siempre nuestro comportamiento tiene como motivaciones las órdenes, las costumbres o los impulsos. Estas motivaciones de nuestro comportamiento son producto del ejercicio del poder de elegir de personas que nos han precedido en la grandiosa experiencia de existir y de uno mismo, pero como todo buen ser humano es susceptible de equivocarse, es mejor que nosotros no aceptemos las órdenes y las costumbres ni nuestros caprichos sin someterlos a una profunda reflexión para ver si son convenientes o inconvenientes de acuerdo el nivel de desarrollo moral en el que se mueva nuestro espíritu y sin perder nunca de vista el proyecto de una buena vida humana.


HAZ LO QUE QUIERAS


Algunas veces dejarse llevar de la mano por otros resulta muy cómodo y hasta conveniente pero no siempre resulta así, por lo que es verdaderamente imprescindible examinar a fondo todas nuestras motivaciones y ejercer nuestra propia capacidad para inventar y elegir nuevas posibilidades de manera informada y responsable siempre con vistas a un proyecto de construcción de una buena vida humana.

En el capítulo que nos ocupa el autor propone a sus lectores un lema que puede servir como guía a todo explorador de la esta realidad sensible y suprasensible que es la actuación humana:

· Haz lo que quieras, es decir déjate de órdenes, costumbres e impulsos y elige por ti mismo. Invéntate un modo de vida propio y no dejes que otro decida por ti.


CONCLUSION


Como a estas alturas estas comprendiendo la expresión: “Haz lo que quieras” no significa actuar impulsivamente, ni dejarte conducir por un pastor como si fueras un borrego, sin menosprecio de esta especie compañera existencial, y si aprender a elegir por ti mismo.

Cuando el autor nos invita a hacer lo que queramos nos está diciendo que nos atrevamos a darnos la buena vida sin hacer caso a los tristes, a los beatos, a los voraces, a los vanidosos, etc., pero que tengamos en cuenta que somos seres humanos entre seres humanos.


DATE LA BUENA VIDA


El principio fundamental de la ética Savateriana: “Haz lo que quieras”, bien comprendido nos mueve a reflexionar profundamente sobre las consecuencias de nuestros actos, y a no acatar mandatos o costumbres sin hacer una valoración sobre la conveniencia o inconveniencia de los comportamientos tutelados. Este principio nos sirve de guía para inventarnos una forma de vida sin que nadie elija por nosotros.

Si deseas saber cómo puedes emplear lo mejor posible tu libertad (poder de elección) debes preguntártelo a ti y no permitir jamás que el sacerdote, el sabio, el legislador o tus impulsos te muevan como marioneta. En esta grandiosa empresa de saber vivir debes saber ser humano entre seres humanos. Ser humano consiste principalmente en el reconocimiento de la existencia de otros seres humanos que gozan la misma dignidad y derechos que uno disfruta. Un ser humano auténtico esta conciente que sólo conviviendo con sus semejantes es posible llegar a desarrollar todas sus dimensiones, que sólo viviendo rodeado de amor y agradecimiento puede ser feliz y que su mejor alimento espiritual es el disfrute de las dulces relaciones humanas.


CONCLUSIÓN

La ética es el intento racional de saber vivir una verdadera vida humana, en la que reconozcas a tu prójimo la misma dignidad y derechos que tú disfrutas y estés consciente que solamente en contacto con los demás podrás alcanzar tu pleno desarrollo humano. Además de disfrutar a plenitud tu dimensión afectiva, intelectual, espiritual, etc.


DESPIERTA, BABY

El mundo en que se puede vivir bien es aquel en que la vida se desenvuelve entre dulces relaciones humanas dando y recibiendo amor y agradecimiento. La manera en que nos tratamos los seres humanos es en extremo importante porque los seres humanos nos humanizamos los unos a los otros, al tratar a otro ser humano como ser humano estoy haciendo posible que me devuelvan lo que solo otra persona es capaz de devolverme agradecimiento y afecto. En este planeta el enemigo más peligroso es otro ser humano por muy débil e indefenso que lo percibamos es capaz de armar acechanzas y sabotear o estropear nuestra plena humanización, por lo que sin duda alguna es mejor que crezca junto a ti sin discriminarlo.


CONCLUSIÓN


La expresión: despierta, baby que es mejor vivir rodeado de agradecimiento afecto y amor en lugar de odio y temor. Las dulces relaciones humanas son más importantes para un ser humano pleno que la acumulación de riquezas. Disfruta de la humanidad vivida entre personas no entre cosas.


APARECE PEPITO GRILLO


En este capitulo se plantea que el deber de todo ser humano es no ser imbécil moral, es decir el que necesita apoyarse en las cosas de afuera que no tienen nada que ver con la libertad y la reflexión propias. Lo contrario de ser moralmente imbécil es tener conciencia, esta nos dice porque esta mal lo que llamamos malo. La conciencia supone el conocimiento de los rasgos de tu propia naturaleza humana y pensar de veras en uno mismo en lo que nos conviene verdaderamente porque no estropea o daña lo que somos.
Si con tus comportamientos dañas a otra persona, si no eres un imbécil moral, es decir si tienes conciencia, ésta te hará sentir remordimientos, no por el miedo a la cárcel o al infierno, sino por haber estropeado lo que verdaderamente eres un ser humano pleno.
Lo que llamamos remordimiento no es más que el descontento que sentimos con nosotros mismos cuando hemos empleado mal nuestra libertad, es decir cuando la hemos utilizado en contradicción con lo que realmente queremos.


CONCLUSIÓN


Debemos recordar que somos seres vivos en un sistema ecológico, racionales, sociales, libres, políticos, creativos, históricos, comunicativos, individuos en una comunidad, es decir estamos conscientes de lo que somos y por ende debemos actuar de acuerdo con lo que somos, sino experimentaremos un gran descontento por no haber actuado en congruencia con lo que verdaderamente somos.

PONTE EN SU LUGAR


El ser humano nació para vivir humanamente, es decir entre seres humanos y para los seres humanos, su misión es fomentar en todo lo posible la felicidad de los demás. El principio básico de la buena vida es tratar a los demás como a seres humanos, es decir ser capaces de ponernos en su lugar, compenetrarnos en sus sentimientos, necesidades, experimentar sus alegrías y sufrimientos como propios.
El desarrollo de la capacidad de empatía es una de nuestras máximas conquistas en nuestro proceso de humanización, cuando somos capaces de ver con los ojos del otro y sentir con su piel, también somos capaces de relativizar nuestros intereses con miras en los de nuestros semejantes e intentar fomentar en todo lo posible la felicidad de los demás.


CONCLUSIÓN

En esta realidad que nos toco compartir, nuestra libertad es una fuerza transformadora que puede ser usada por los imbéciles morales para tratar a los seres humanos como cosas u objetos de ambiciones mezquinas, o bien por los humanos plenos para buscar la felicidad de todos sus semejantes.
Cuando tratas de perjudicar a un ser humano, eres tú el que más se perjudica al actuar desconociendo o no haciendo caso a lo que realmente eres.


TANTO GUSTO


En el capitulo en cuestión el enunciador hace una profunda reflexión sobre la existencia de los calumniadores del placer , aquellos que temen a disfrutar el placer por saber que este es algo irresistible que los embriaga y embota sus sentidos y voluntad tornándolos en una babeante y repulsiva criatura incapaz de detenerse.

Un ser libre no siente temor al placer y sabe usarlo para enriquecer su vida y no deja que el placer se convierta en algo más importante que la vida. El placer es un ingrediente de la plenitud de la vida , no un refugio para escapar de la vida. El placer produce alegría y cuando comienza a producir dolor deja de convenirnos.

CONCLUSIÓN


El uso del placer debe hacerse dentro del marco de la templanza, hay que saber evitar caer del gusto al disgusto. No hay que temer al placer, sino al dolor que produce la falta de templanza. Debemos tener siempre presente que lo que hace disfrutar y no daña a nadie no es malo. Usa los placeres de la vida pero no abuses.


ELECCIONES GENERALES


Los vicios y defectos de los políticos son más visibles, por estar bajo los reflectores, que el resto de las personas. Entre los políticos encontramos seres éticos e inmorales, pero la ética no es una arma arrojadiza para castigar inmoralidades. La ética sirve para intentar mejorarse a uno mismo no para reprender elocuentemente al prójimo. Los políticos tienen tan mala fama porque se parecen a nosotros. Lo que nos preocupa verdaderamente, al hacer estas reflexiones, es saber como se relacionan la ética y la política. La ética es el arte de saber elegir lo más conveniente y vivir lo mejor posible y la política es el arte de organizar lo mejor posible la convivencia social de modo que cada cual pueda elegir lo que mas le convenga. Como el ser humano no puede vivir aislado y tiene la preocupación ética de vivir mejor, no puede desentenderse de la política. El poder político debe usarse para remediar las carencias y debilidades en las relaciones humanas y nunca para perpetuarlas.
Los problemas que enfrenta la humanidad serían más fácil de resolver si los enfrentáramos todos los seres humanos en un mundo políticamente unificado.

CONCLUSION:

La ética sirve para intentar mejorarse así mismo. La política sirve para organizar lo mejor posible la convivencia social.